Manipulación, intereses y mentiras

Tengo que confesar un secreto: He borrado un comentario que había puesto. Es más, han sido dos. Y no es la primera vez. Buf, me siento mucho mejor ahora que lo he soltado. :P Ahí donde estaba una contestación, no hay otra cosa más que el vacío. Donde dije digo digo ziego, y nadie tiene constancia de que alguna vez haya estado ahí ese comentario.

Un simple blogger puede cambiar la realidad (de su blog, pero realidad al fin y al cabo) ¿os habéis preguntado alguna vez hasta donde puede llegar la manipulación a otros niveles? El documental zeitgeisty su continuación tratan sobre este tema, pero sinceramente, no se hasta qué punto es la sociedad consciente de todo lo que ocurre a nuestro aldrededor. Orwell (autor de 1984) dijo, hablando de la guerra civil española:

Ya de joven me había fijado en que ningún periódico cuenta nunca con fidelidad cómo suceden las cosas, pero en España vi por primera vez noticias de prensa que no tenían ninguna relación con los hechos, ni siquiera la relación que se presupone en una mentira corriente. (...) En realidad vi que la historia se estaba escribiendo no desde el punto de vista de lo que había ocurrido, sino desde el punto de vista de lo que tenía que haber ocurrido según las distintas «líneas de partido». (...) Estas cosas me parecen aterradoras, porque me hacen creer que incluso la idea de verdad objetiva está desapareciendo del mundo. A fin de cuentas, es muy probable que estas mentiras, o en cualquier caso otras equivalentes, pasen a la historia. ¿Cómo se escribirá la historia de la guerra civil española? (...) Sin embargo, es evidente que se escribirá una historia, la que sea, y cuando hayan muerto los que recuerden la guerra, se aceptará universalmente. Así que, a todos los efectos prácticos, la mentira se habrá convertido en verdad. (...) El objetivo tácito de esa argumentación es un mundo de pesadilla en el que el jefe, o la camarilla gobernante, controla no sólo el futuro sino también el pasado. Si el jefe dice de tal o cual acontecimiento que no ha sucedido, pues no ha sucedido; si dice que dos y dos son cinco, dos y dos serán cinco. Esta perspectiva me asusta mucho más que las bombas, y después de las experiencias de los últimos años no es una conjetura hecha a tontas y a locas.

Negu Gorriak, siguiendo la misma idea, cantaron Hiltzaileek idatzi zuten historia ofiziala (los asesinos escribieron la historia oficial) y Rage Against the Machine gritaron una y otra vez:

Who controls the past now controls the future
Who controls the present now controls the past
Who controls the past now controls the future
Who controls the present now?

Por si alguien no se ha leído 1984 o no recuerda el trabajo del protagonista (Winston Smith) os diré que su labor era reescribir las noticias. Manipulaba periódicos e informes para que nunca constasen los errores de El Partido, y cambiaba las estimaciones (una vez obtenidos los datos definitivos) para que El Partido nunca se hubiera equivocado.

Estoy convencido de que hoy en día estamos inmersos en enormes mentiras que aceptamos como verdades incuestionables. Cientos, tal vez miles de Winston Smith encarrados en lujosos despachos deciden la historia, cambian la versión oficial, maquillan los datos y nos los ofrecen en brillantes bandejas de plata. No se si la crisis es verdaderamente una consecuencia de nuestros hábitos, si la gripe A es una cortina de humo, si las ventas forzadas de tamiflú en las dos últimas pandemias tiene algún interés oculto, si el 11S fué un atentado de unos insurgentes... y probablemente nunca lo sabré.

¿Sabéis qué es lo que más me jode? Que no hay nada que hacer. Informarnos por los medios menos globales, recurrir a radios piratas o escribir y distribuír pasquines solo alargará la batalla que tienen ganada de antemano. Es más, cuando el poder controle todas las noticias se encargarán de que las cadenas no globalizadas, las radios piratas y los rebeldes que distribuyen pasquines no existan. O peor: Se encargarán de que nunca hayan existido.