Gracias, mil y una gracias a la persona que hoy ha hecho por mí algo que tardaré en olvidar. La única persona que entendió realmente lo que supuso para mí la pérdida de mi bici, esa pérdida de valor infinitamente más sentimental que real. Esta pequeña gran persona, a pesar de su baja estatura no ha dudado un pelo en ponerse delante del moro que iba sobre mi bici y exigirle que se bajara, diciendole que esa bici no era suya. No ha dudado un segundo en llamar a la Ertzaintza, y ahora mismo guarda mi bici, mi mítica bici azúl de cuadro hexagonal, que ansio ver a mi vuelta del Camino de Santiago. Gracias amor, gracias por una razón más que de costumbre ;)
3 comentarios:
no hay de qué
Pero el moro no tenia culpa alguna. Los bartolo se la vendieron y el moriko el pobre no sabia que era robada. Ahora le van a estraditar y vete a saber en que lios acaba metido. Drogas, delincuencia... Con tu bici ha sido feliz, ahora tendra que robar dinero para pillar el tranvi. Pobre.
Un/a gran heroe/heroina como ya le dije ayer. Y el moro que se joda y le den por culo, si compras a robado es a lo que te expones.
Publicar un comentario